El eco en la habitación
Imagine que entra en una habitación tranquila y aún así escucha un eco. Ese eco no es suyo, pero está rebotando, haciéndole sentir pesado, confundido o cansado. Así es como el dolor generacional puede vivir en nosotros. La sanación ancestral nos ayuda a escuchar ese eco, entenderlo y silenciarlo suavemente.
¿Cómo se puede transmitir la depresión?
En las familias Latinx, a menudo se nos enseña a ser fuertes, a seguir adelante, a no mostrar debilidad.
Pensamientos que podemos tener:
“Mis problemas no son tan graves. Otros lo pasaron peor.”
“No tengo derecho a sentirme triste. Tengo un techo y comida.”
“Soy el primero en llegar tan lejos. Debería estar agradecido, no triste.”
Estas creencias provienen del amor, pero también de la supervivencia. Y a veces, no dejan espacio para que sintamos lo que necesitamos sentir.
¿Qué es la sanación ancestral?
La sanación ancestral es conectar con el dolor, la fuerza y las historias de aquellos que vinieron antes que nosotros. Es decir: “Veo por lo que pasaste y elijo sanar lo que no se sanó antes.” Puede incluir:
- Hablar con los ancianos o escuchar historias familiares
- Rezar o meditar pensando en los antepasados
- Escribir cartas a generaciones pasadas
- Llorar las lágrimas que nunca pudieron derramar
¿Por qué ayuda con la depresión?
Cuando llevamos la depresión, a veces es porque estamos reteniendo la tristeza que no es del todo nuestra. Honrar ese dolor y liberarlo puede traer una paz profunda. No se trata de culpar, se trata de entender. Cuando sanamos, no solo nos sentimos mejor, sino que nos convertimos en puentes de sanación en nuestra línea familiar.
No está solo en su tristeza. Y su sanación no es solo para usted, es para las generaciones anteriores que nunca tuvieron la oportunidad, y para las que vendrán después que heredarán su fuerza. Sanar tu corazón es un acto de amor para ti, para ellos y para lo que está por venir.
